Además del azufre, el NO es una de las sustancias más indeseadas en el tratamiento posterior de los gases de escape. Se origina debido a la división de N2 en el cilindro y la reacción con O2 a temperaturas del cilindro muy elevadas. La supresión de la formación de Nox y la reducción del tratamiento posterior de los gases de escape es una de las tareas principales de los fabricantes de motores y catalizadores. Sea cual sea la estrategia, p. ej. incineración a bajas temperaturas, retorno de gases de escape (AGR), reinyección para generar suficiente C para la reducción catalítica o tecnología RCS con descomposición de urea en las moléculas de amonio, todas estas reacciones altamente dinámicas y dependientes de la temperatura requieren una medición rápida de un gran número de componentes para la optimización en condiciones volátiles.